Vivir en “el aquí y en el ahora” puede resultarnos complicado si no hemos aprendido a educar nuestra mente. Es necesario ejercer control sobre ella para que deje de brincar de un lado a otro.
Ejercer este tipo de control requiere tiempo y paciencia, y por supuesto que también voluntad. Debemos de acechar nuestra mente para saber qué es lo que contiene, pero hacerlo no es tan sencillo cuando no se tiene la práctica necesaria.
Y lógicamente, para obtener esta práctica tenemos que esforzarnos, solo así podremos meter en cintura a la tan famosa “loca de la casa”.
Hay muchos métodos útiles para tal efecto, obviamente requieren de un tiempo y dedicación continua y empezar puede resultar no muy fácil.
Cuando yo he tratado de meditar me he dado cuenta de que ya sentada y dispuesta a tener un momento de silencio mental, me encuentro a mí misma recorriendo los eventos del pasado y preocupándome mucho por los eventos futuros, sin lograr quedarme en el presente.
Así que tal vez lo mejor sea comenzar por trabajar en quedarme en el presente, así que aquí te dejo un ejercicio muy sencillo, que podrás hacer en cualquier momento del día, sin preparación alguna, y sin dejar de hacer lo que estés haciendo para poder practicar eso de estar “en el aquí y el ahora”, en el presente, que dicho sea de paso… es lo único que tenemos como seres espirituales…el presente.
Yo soy Luisa Isabel, Sembradora de Paz.
Vivir en “el aquí y en el ahora” puede resultarnos complicado si no hemos aprendido a educar nuestra mente. Es necesario ejercer control sobre ella para que deje de brincar de un lado a otro.
