¿Has probado la meditación con cuencos tibetanos? O mejor aún ¿has sentido un masaje sónico con los cuencos? Los cuencos tibetanos durante mucho tiempo han sido considerados como instrumentos de curación, sanación, relajación y meditación, mediante el restablecimiento de una vibración más sana en todo el organismo, a nivel físico, mental, emocional y espiritual.
Los grandes expertos en terapia de sonido ya han descubierto científicamente que el uso de ciertos sonidos es capaz de destruir células malignas y favorecer la curación de infinidad de enfermedades, en algunos casos,es posible inducir estados de sanación espontáneos.
Los cuencos tibetanos son también muy útiles en el ámbito emocional para disminuir ataques de ansiedad, y conducir a la persona a un estado de relajación y serenidad. El cuenco rompe nudos energéticos y desbloquea situaciones emocionales.
A nivel espiritual, son muy efectivos equilibrando los chackras. Los cuencos fueron diseñados para armonizar los centros de energía del ser humano. Los chackras están fuertemente relacionados con las glándulas del cuerpo y tenerlos en armonía te ayudará a tener más energía y mejor salud.
Origen e historia de la terapia del sonido con cuencos tibetanos
Los orígenes de los cuencos tibetanos y su historia detallada se pierden en el pasado lejano y seguramente es un regalo de la religión chamánica Bon, que existía en el Tíbet varios siglos antes de la llegada del budismo.
Es una tradición ancestral enigmática que hasta la década de los 50 ´s se mantuvo oculta. Tradicionalmente los cuencos tibetanos se utilizaban para la meditación y la sanación en los monasterios de monjes.
Fue hasta el 14º Dalai Lama que se empiezan a dar a conocer en todo el mundo. Los cuencos tibetanos o cantadores son una herramienta extraordinaria que están hechos a mano, con una vibración séptuple y esto ayuda mucho al ser humano, porque hay que tener en cuenta que todo es vibración.
Beneficios del masaje sónico
Los cuencos tibetanos al ser colocados sobre el cuerpo producen grandes cambios, gracias a a su vibración. Se experimenta mayor claridad mental, aumento de la creatividad, mayor concentración, relajación, mayor visión de futuro y una gran sensación de paz que induce fácilmente a la meditación.
Es como una limpieza, una depuración a través de la vibración del cuenco en tu cuerpo. Una vibración limpia, sintonizada con las más altas vibraciones del universo.
Como resultado de este masaje es posible sentirse más productivo, más centrado, más feliz, más sereno, más equilibrado, más en paz.
Existe un espacio de paz en nuestro interior y los cuencos tibetanos nos ayudan a entrar en él, nos ayudan a resonar con nuestra verdadera consciencia, con la paz y el amor que existe dentro y fuera nuestro.
Además de hablar sobre las bondades de los cuencos tibetanos, nuestro invitado, Gustavo Ramón comparte con nosotros una hermosa meditación con el uso de cuenco tibetanos. ¡No te la puedes perder!
Yo soy Luisa Isabel, Sembradora de paz y consciencia.
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